Reflexión a una imagen

Hoy en clase nos han enseñado una foto que merece una buena reflexión y nuestro tiempo para pensar en ella.
Estaes la imagen:

En la imagen se aprecia a un niño negro, seguramente procedente de Áfica, que sostiene una pizarra o un cuadro, con los bordes blancos y la losa verde. Y contiene este mensaje:
Tu Cristo es judío
Tu escritura es latina
Tus número son árabes
Tu democracia es griega
Tu equipo de música es japonés
Tu balón es de Corea
Tu videoconsola es de Hong Kong
Tu camisa es de Tailandia
Tus estrellas favoritas son de Brasil
Tu reloj es suizo
Tu pizza es italiana
...
¿Y... tú eres el que mira a ese trabajador inmigrante como un despreciable extranjero?

Obviamente, la imagen es un montaje, porque el niño esta sonriendo-y no tiene nada que ver con el mensaje que quiere transmitir- y las letras son de ordenador.

Cuando vi la imagen, lo primero que hice fue leerla detenidamente, aunque ya me esperaba algún mensaje como este al ver al niño. Y con cada frase que leía, un sentimiento nuevo salía de mí.
Al principio era comprensión, estaba entiendo o que me quería decir y ya sabía hacia donde iban los tiros.
Después, claridad. Al leer toda la primera parte me di cuenta ue vivimos en un mundo globalizado en la que todo esta a disposición de todos. Sin embargo, eso no es así, porque solo los países subdesarrollados lo tienen todo, mientras que muchos de ellos se conforman.
Después me sentí inútil. Mirando hacia alrededor me di cuenta de que todo lo que tengo, o qeu casi todo lo que tengo, pertenece a otros países, que trabajan para que yo los tenga, mientas que yo tengo una buena vida, pero poco productiva.
Y, al final, con el último mensaje, sentí diferentes sentimientos: impotencia, tristeza, furia y vergüenza.

Impotencia, porque yo no puedo hacer nada. No puedo cambiar el pensamiento de las demás personas. Pero sí que puedo cambiar la mía propia. Aunque no hacía falta, yo nunca he sido racista, y creo que es la cosa más sinsentido del mundo. Como dice la canción: "y seamos todos pasajeros por e mundo en un avión".
Tristeza, porque por mucho que yo no sea racista y luche por la igualdad, no pude evitar pensar en la cantidad de gente que sufre racismo en pleno Siglo XXI.
Furia, al pensar en la gente que le da más importancia a tus raíces, tu color de piel y tu raza.